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Toda historia tiene un comienzo, y el de nuestras cuatro ciudades empieza con la fundación de una: Shizuka Toshi.

Hace mucho tiempo existió una joven tan hermosa como amable, su único defecto era su mala salud. Siempre enfermaba, pasa los días en cama esperando recuperarse. Tal vez por eso ella, Takako, no tenía muchos amigos, sólo su familia le hacía compañía y cuidaba de ella.

El tiempo pasó y llegó el momento que todos sabían que llegaría pero nadie quería aceptar, el momento en el que la joven moriría. Su cuerpo débil no podía soportar el invierno y, desde el cielo, enviaron a un Shinigami de nombre Kyou para guiar el alma de takako al más allá. Pero no pudo. Se enamoró a primera vista de la humana y ella de él. Kyou trató de retrasar el día de muerte de la joven para poder pasar más tiempo con ella, pero sus superiores, los ángeles, se dieron cuenta de lo que sucedía.
El amor entre humanos y shinigamis estaba prohibido. A pesar de que ambos tenían sentimientos puros hacia el otro tuvieron que ser separados.
Un día, al amanecer, el alma de takako fue recolectada por un ángel y falleció en el acto, dejando a su amado en soledad.

En cuanto a Kyou... él fue desterrado. Le arrebataron los poderes y fue echado del cielo. Vagó por la tierra hasta llegar a un valle, un lugar en el que fundaría una ciudad de paz, en la que dos enamorados no volvieran a ser separados, en la que todos sin importar su raza o condición tuvieran la posibilidad de vivir felices y en paz: Shizuka Toshi.

Gythio

Una vez Shizuka Toshi creció, se fundó una ciudad situada una isla cercana de ella; Gythio.
Al principio fue un pequeño punto comercial que en poco tiempo creció hasta volverse una metrópolis. Los días de prosperidad y la fortuna que iban acumulando les ayudó a crear varias empresas y fábricas que, aunque contaminaban, les ayudaba a crecer más y más.
Una fábrica creaba varios puestos de trabajos, por ello muchas personas se mudaron ahí. Una cosa llevó a la otra y, antes de darse cuenta, Gythio se convirtió en un lugar repleto de fábricas de todo tipo, sin vegetación alguna y con tanta contaminación que el cielo era imposible de ver, sólo había una capa gris sobre las cabezas de los habitantes.
Muchas personas murieron a causa por enfermedades ligadas a la contaminación, por ello se trató de revertir lo que habían hecho. Se plantaron árboles, se hicieron bosques, pero éstos murieron al poco tiempo y los que no fueron talados para conseguir más dinero.
Se cercó la ciudad para impedir que las personas salieran y se vieran obligadas a vivir ahí, a trabajar ahí y darle más dinero a los grandes empresarios que veían una vida como un recurso que podían explotar.
Los animales ya viven aquí, no hay nada de verde y la contaminación es tal que las nuevas generaciones de aquí nunca han visto un atardecer en directo. Las personas usan máscarillas, algunas máscaras anti-gas para evitar enfermarse, pero hay algunas que se han dado por vencidos y no se preocupan por la contaminación.

Nadie puede salir y nadie quiere entrar.

Sintra

Si bien Sintra parece ser un lugar lleno de lujos, donde las clases bajas prácticamente no existen tiene una historia con un peor desenlace que Gythio.

Nuestro inicio, se sitúa en la época cuando Gythio era un puerto en crecimiento.
Las mafias querían ser parte del negocio, pero era difícil establecerse en una de las dos ciudades ya existentes porque, si bien Shizuka era un lugar próspero tenía su lado malo (para las mafias) gozaba de una seguridad impecable, es decir, si una mafia se instalaba ahí no duraban mucho tiempo ya que la policía se ocupaba de desmantelarla en cosa de semanas.
Gythio sonaba como buena opción para expandirse comercialmente, pero no para crear su base ahí.

Así que lo más fácil fue crear una una ciudad que se adaptara a lo que querían. Creció en silencio, sólo las familias más ricas y ligadas a las mafias tanto americanas como japonesas hicieron de ese lugar rodeada de árboles su hogar.
Las casas se convirtieron en mansiones, grandes edificios se levantaron creando una ciudad sólo para la élite.
Pero no fue todo. También el mercado negro estaba muy presente.
Venta de personas, órganos y valiosos objetos que, en un lugar normal no se podían conseguir.

Aquí no hay policía. Y las variadas mafias, grandes y pequeñas, tienen un territorio específico y mientras alguna otra familia no comercie en ese territorio no habrá problemas.